LA CONVIVENCIA ESCOLAR, UNA RESPONSABILIDAD
COMPARTIDA
Por. DORIS YANETH FLORIÁN FLORIÁN
Coordinadora Convivencia I. E “San Marcos”
En nuestra sociedad
vivimos con la convicción de que la vida de comunidad es la que forma y educa ayudándonos
a conocernos y reconocernos, descartando el egoísmo y disponiéndonos al
servicio de otros, en un clima de comprensión, tolerancia e intervención
solidaria, y es justamente la Institución Educativa el lugar en donde se deben
generar este tipo de procesos de formación.
La Instituciones
Educativa “San Marcos” tiene, entonces, un rol decisivo en la formación
integral de los niños, niñas y jóvenes ya que tiene la difícil función de
acompañarlos a transitar por el camino que los llevará a la vida adulta,
colaborando en la construcción de su proyecto de vida. Por lo tanto es
responsabilidad tanto de Directivos, como de Docentes, Estudiantes y Padres de
Familia establecer un clima de confianza en el que prevalezca el diálogo como
la única herramienta que nos permite solucionar de manera pacífica los
conflictos; estamos seguros que fomentando el diálogo y la participación activa
de todos los miembros de la Comunidad Educativa Sanmarquista alcanzaremos
consensos que mejoren nuestra convivencia escolar, la cual aspiramos que más
que un régimen disciplinario que define conductas negativas y sanciones, sea un
proceso que involucre principios, ideales, valores y acciones pedagógicas que
conduzcan a una formación integral de nuestros educandos, basada en un
aprendizaje constructivo donde el auto aprendizaje, la autodisciplina y la
autonomía permitan a los estudiantes reflexionar sobre sus propios actos.
De la misma manera
estamos convencidos que para formar
integralmente a los jóvenes en necesario propiciar espacios que les permitan
entender el valor del respeto, la solidaridad, la tolerancia, el diálogo y la
responsabilidad, sabiendo siempre que Docentes, Directivos y Padres de Familia
seremos los garantes de este proceso.
El logro de una sana convivencia
en nuestra institución supone haber
alcanzado la aceptación del disenso, de la diferencia y la aplicación de
mecanismos de diálogo y de mediación para la solución de los conflictos
cotidianos. Es para nosotros un desafío poner en práctica una clara definición
de roles y la implementación de procedimientos que garanticen que, ante la
transgresión de la norma, puedan tenerse en cuenta las causas, el contexto, dando
lugar a las reparaciones posibles.
Como comunidad
Sanmarquista deseamos vivir intensamente
el espíritu de comunión y participación, constituyéndonos así en una verdadera
comunidad educativa que, no solamente cree sino que además está convencida que
la única forma de solucionar los problemas se llama EL DIÁLOGO, de esta manera
estaremos cambiando el mal hábito de utilizar la violencia como medio de
solución a los problemas, que se ha fijado de tal forma en el ideario de
nuestros habitantes, hasta el punto de considerarla parte de la cultura.